La nafta podría subir hasta un 20% desde el 1 de junio. La suba responde al cronograma de actualización de los impuestos al combustible líquido (ICL) y al dióxido de carbono (IDC), el cual desde el Gobierno aún debe definir si aplica el incremento, o lo pospone como lo hizo en el mes de mayo.
En caso de avanzar con la suba de los gravámenes, dicho incremento se trasladará de manera automática a los surtidores de las estaciones de servicio de todo el país.
El Gobierno oficializó el jueves 2 de mayo la postergación del aumento en el impuesto sobre los combustibles líquidos (ICL), al trasladar los efectos de la suba de mayo a junio, mediante el Decreto 375/2024 publicado en el Boletín Oficial.
En el documento oficial, se explicó que se resolvió posponer el incremento «con el fin de estimular el crecimiento de la economía garantizando un sendero fiscal sostenible». Además, desde el Gobierno indicaron que «la medida garantiza previsibilidad al sector y establece que no habrá incremento alguno, por dichos conceptos, en el mes de mayo».
Ahora se conocerá si el Gobierno tendrá la voluntad de posponerlo en una oportunidad más o, en el caso contrario, definirá incrementar los valores en el corto plazo.
Las naftas podrían volver a tener un elevado incremento de sus valores en junio en el caso de que no se postergue nuevamente los impuestos al combustible liquido (ICL) y al dióxido de carbono (IDC).
