La vicepresidenta Cristina Kirchner recibió este miércoles a la tarde a su próxima sucesora, Victoria Villarruel, en su despacho del Senado, para comenzar la transición en ese cuerpo legislativo, y la dirigente libertaria definió la reunión como «muy cordial».
Según supo Noticias Argentinas, la diputada nacional, que asumirá como vicepresidenta el 10 de diciembre, ingresó muy puntual a la Cámara alta por la calle Combate de los Pozos. El encuentro arrancó a las 17.10 y finalizó poco antes de las 18.
Durante la reunión, se coordinó la organización de la Asamblea Legislativa del 10 de diciembre y se repasaron los principales hechos de la gestión, según comunicaron fuentes cercanas a Cristina Kirchner.
«Es una reunión histórica para todos los argentinos», dijo Villarruel al tomar contacto con la prensa apenas finalizado el encuentro, al que llegó acompañada por tres colaboradores.
La diputada de La Libertad Avanza también calificó la conversación como «muy cordial» y adelantó que va a «trabajar intensamente durante el verano» con todos los bloques para sacar las leyes que envíe el Poder Ejecutivo.
En ese sentido, cae de maduro que, una vez en funciones, Milei va a convocar a sesiones extraordinarias del Congreso.
De acuerdo con lo informado por fuentes de la presidencia del Senado, durante el encuentro con Villarruel, la vicepresidenta destacó que, al asumir la gestión, se recibió la obra social del personal legislativo (DAS) con $390 millones de déficit mensual y que, luego del proceso de saneamiento y mejoras en la gestión, se logró un superávit equivalente a cinco meses de prestaciones, ampliando al mismo tiempo los servicios y prestaciones para los afiliados.
Cristina Kirchner también le comentó que, en cuanto a los recursos humanos del Senado, en la actualidad la Cámara alta cuenta con una nómina de 400 empleados menos que la gestión anterior.
También le hizo un repaso a su sucesora sobre el estado de los avances y mejoras edilicias que se llevaron adelante durante la gestión, «con el objetivo de poner en valor los espacios de valor patrimonial y mejorar los espacios de trabajo del personal del Senado».
La reunión había sido coordinada por la secretaria Administrativa del Senado, María Luz Alonso, quien, por instrucciones de Cristina Kirchner, se puso en contacto con el diputado electo Guillermo Montenegro, uno de los hombres del círculo de mayor confianza de Villarruel, para acordar el día y la hora de la audiencia.
El encuentro protocolar generaba una fuerte expectativa por las notorias diferencias ideológicas entre la vicepresidenta en ejercicio y su sucesora en el cargo.
La cumbre de vicepresidentas se produjo un día después de que el presidente saliente, Alberto Fernández, recibiera a Milei en la Quinta de Olivos, donde mantuvieron un intercambio que el líder de La Libertad Avanza calificó de «muy productivo» y «cordial».
Cristina Kirchner decidió promover el encuentro con Villarruel luego de suspender un viaje a Nápoles, Italia, donde tenía previsto encabezar una clase magistral en una universidad sobre la «insatisfacción democrática».
También existía la posibilidad de una audiencia con el Papa Francisco en el Vaticano, aunque dicha cita nunca llegó a confirmarse.
CADENA 3.-