Justicia por mano propia: desnudó a un ladrón y lo ató a un poste en un barrio de Salta

admin
Un hombre acusado de formar parte de una banda de ladrones fue obligado a quitarse la ropa hasta ser atado en un poste de luz en la zona sudeste.

Un vecino del barrio San Justo decidió tomar cartas en el asunto ante la ola de inseguridad que azota la zona. Este domingo un grupo de delincuentes ingresó a su negocio y lo desvalijaron.

Sin embargo, el dueño del local logró reducir a uno de los ladrones y, en un acto de clara venganza, lo ató a un poste de luz en la vía pública.
No contento con esto, el vecino obligó al delincuente a quitarse sus prendas de vestir hasta quedar prácticamente desnudo, en ropa interior. Además, con un marcador, escribió en el pecho del joven la frase “No robar”.
A través de un video que circula en redes sociales, el vecino justiciero justificó su accionar argumentando que la policía no hace nada para combatir la delincuencia en la zona.

“Lo que no hace la Policía lo hacemos nosotros, por rastrero. Es uno de los ocho que se han metido, faltan los hermanos Chuletas, falta el rengo Ema de Primera Junta, Rulo de Paraíso, Cafú, ya hemos agarrado a otros tres y a este. Se hacen los ladrones, ahí está”, expresó el hombre en el video.
Este hecho genera el debate en la sociedad salteña sobre la inseguridad, la justicia por mano propia y el rol de las fuerzas de seguridad.
Muchos vecinos aplauden la valentía del hombre que defendió su propiedad. El ladrón permaneció atado al poste hasta que llegó un patrullero policial.
«Acá tengo al segundo»
Con relación al mismo hecho, otro de los supuestos ladrones también fue atrapado por el vecino damnificado y con la ayuda de otros también lo ató a un poste en la vía pública.
«Bueno acá tenemos a otro salame, acá tengo al segundo, ya van a caer los otros. El tuerto Ema se ha pirao, acá lo vamos a agarrar a todos, han desvalijado mi casa, se han hecho los vivos», se escucha en otro de los videos que circula por las redes sociales, mientras el acusado es atado con una cuerda.
EL TRIBUNO.-

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