A partir de octubre, el Gobierno ha aumentado el alcance de la Prestación Alimentar en previsión de un fin de año complicado. La asistencia se dirige especialmente a adolescentes de 14 a 17 años que provienen de familias vulnerables. La proyección presupuestaria para el tercer trimestre asciende a $551.130 millones, lo que suma casi dos billones de pesos en inversión anual total ($1.909.490.958.677). A pesar del aumento de la pobreza en la primera mitad del año, el Gobierno confía en que los índices mejorarán y no prevé conflictos sociales.
Fuentes oficiales indican que la medida busca cubrir el 98,4% de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) para más de 600.000 adolescentes en situación de vulnerabilidad. Desde el Ministerio de Capital Humano, liderado por Sandra Pettovello, se argumenta que esta ampliación es esencial, ya que muchos jóvenes de 15 a 17 años no recibían la tarjeta Alimentar y dependían únicamente de la Asignación Universal por Hijo (AUH), que no cubría ni el 50% de la canasta básica. Este grupo ha sido históricamente marginado en cuanto a la asistencia estatal.
El incremento en la ayuda se implementa en el último trimestre, período en el que diciembre suele ser crítico debido a reclamos sociales. Sin embargo, hay sectores dentro del Gobierno que consideran necesario revisar los montos de asistencia social para 2025.
Según el Indec, la pobreza alcanzó el 52,9% en el primer semestre, lo que representa un aumento de 11,2 puntos desde diciembre de 2023, afectando a 24,9 millones de personas. La indigencia también ha aumentado, alcanzando el 18,1% de la población. La situación es más crítica entre los menores de 14 años, con un 66% de pobreza, y el 60% en el grupo de 15 a 29 años.
A pesar de estos alarmantes datos, el Gobierno mantiene una postura optimista, creyendo que diciembre será un mes tranquilo para los sectores más vulnerables, a pesar del ajuste del gasto público. Aumentaron la asistencia social para adolescentes y afirman que los montos de ayuda han crecido y llegan directamente a quienes los necesitan, eliminando intermediarios.
Desde el Ministerio de Capital Humano se asegura que se mantendrá el mismo alcance en los programas para 2025, aunque algunos sectores gubernamentales prevén una reducción en la asistencia el próximo año, confiando en que disminuirá el número de personas que requieran apoyo estatal. Este optimismo contrasta con las opiniones de expertos.
En la Casa Rosada consideran que la asistencia social debe ser temporal y de emergencia, criticando a los gobiernos anteriores por no haber logrado sacar a la población de la dependencia de los planes. Asimismo, vinculan su confianza en una reactivación económica a la expectativa de que la próxima medición del Indec refleje una disminución en los índices de pobreza, que esperan ya esté por debajo del 49%. Aceptan que la situación sigue siendo crítica, pero aseguran que se observa un descenso significativo.
Finalmente, resaltan que la última medición de pobreza del Indec, que registró un 52,9% para el primer semestre, se realizó en junio, abarcando los peores meses del año, influenciados por la gestión anterior y los ajustes iniciales.